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martes, 27 de diciembre de 2011

El demagogo e hipócrita Javier Barden

Me divierte esta gente. Ya no saben qué hacer para llamar la atención. Su «marketing» –perdón por la cursilería– se sustenta en la grosería calculada y la incoherencia. Hace pocos días, el Instituto Reina Sofía de Nueva York entregó sus premios. No tengo la relación de los miembros que componen su jurado, pero me temo más de una sorpresa. Entre los premiados estaba el inevitable Javier Bardem. Todos los presentes, empezando por la Reina, protocolariamente vestidos. Pero como Javier Bardem es comunista y republicano, se presentó sin corbata para parecer más de izquierdas. La Reina le entregó su medalla y Javier Bardem se la agradeció recordando a la Reina su condición de republicano, detalle que a la Reina y al resto de los presentes les importa un bledo. El día que le concedan el Premio Quesos de Castilla, lo dirá cuando reciba el queso: «Muchas gracias, pero soy republicano». Años atrás, encabezó el movimiento de la Ceja con su oposición a la guerra de Irak y llamó asesino a Aznar. Poco después, el Gobierno socialista de Zapatero mandó a nuestros soldados a luchar en la guerra de Afganistán. Pero Bardem se calló, seguramente por su condición de republicano. También, desde su condición de anticapitalista y antinorteamericano, montó un «lobby» para acceder a la posibilidad de ser premiado con un «Oscar». Es un buen actor y ganó el «Oscar». Y a pesar de que se lo daban en los Estados Unidos lo aceptó encantado, olvidando su condición de antinorteamericano, anticapitalista y republicano, que allí en Estados Unidos significa ser muy de derechas.También es un decidido defensor de la causa palestina, y los judíos le caen muy mal. Pero lo que son las cosas. Ingresó a su mujer, Penélope Cruz, en unos de los hospitales más caros del mundo para que ésta diera a luz al hijo de ambos. En un hospital de Los Ángeles fundado y administrado por la comunidad judía. Lo normal y lógico en un antinorteamericano, anticapitalista y antisemita. El feliz matrimonio viene poco por España, porque aquí el cine no tiene dinero, y el anticapitalista busca dólares en otros mercados. Pero como las raíces tiran, el joven matrimonio anticapitalista, antinorteamericano, antisemita y republicano ha elegido para vivir la urbanización «La Finca», la más exclusiva de los entornos de Madrid, y hace muy bien, porque un comunista anticapitalista tiene todo el derecho a vivir entre multimillonarios si puede mantener ese nivel de vida. Y cuando le pregunte un inocente militante comunista el motivo de tanto lujo, el coherente le responderá: «Ya ves, vivo ahí, pero soy republicano». Sentirse comunista, antinorteamericano y republicano, no garantiza la coherencia. Por respeto a la Reina, pero más aún, por respeto a su condición de republicano, no se acepta el premio del Instituto Reina Sofía, y si se acepta, se acude vestido de premiado, no de grosero marginal. Por respeto a su condición de antiamericano y anticapitalista, no se acepta el «Oscar». Por respeto a sus simpatías palestinas y desafectos hacia Israel, no se tienen los hijos en un hospital judío carísimo. Y por respeto a su condición de comunista, no se hace uno una casa en la urbanización más selectiva de Madrid. Y todavía hay gente que admira su militancia en la izquierda. Gente muy divertida, por otra parte. 4 Diciembre 11 - - Alfonso Ussía

Juicio a Camps

Vaya por delante que, el que roba, o defrauda de alguna manera al pueblo que lo ha votado, debe pagar las consecuencias. Si el señor Camps, ha aceptado trajes, aunque sea a cambio de nada, simplemente por ser quien es, que lo pague. Dicho esto, hay que matizar algunas cosas. En primer lugar, al señor Camps ya lo están juzgando, y se le acusa de cohecho pasivo, es decir de recibir dádivas por su cargo, aunque no de nada a cambio. Si, en España, tuvieran que dimitir todos los cargos públicos, desde políticos, incluido Presidente del Gobierno, hasta cargos medios de la administración, Jefes Superiores de Policía, etc... deberían dimitir, porque no hay ni un cargo que no reciba algún regalito por ser quien es. Porque sí, querido funcionario público, si usted recibe, por ejemplo, en Navidad, un botellita de whiski, una paletilla de jamón o un bote de champú, de alguien externo a la administración, es también cohecho pasivo. No vale decir " es que yo no doy nada a cambio, además no se puede comparar una paletilla con 20 trajes ", se equivoca, es lo mismo. Así que no vayamos de decentes por la vida tan alegremente. Otro dato importante es que el señor Camps dimitió de su cargo, sin embargo en Andalucía están imputados cargos del PSOE y de IU por el caso de los ERES y Mercasevilla, y no dimiten ni a tiros. Por no hablar del señor Pepiño Blanco, cuya honorabilidad ha quedado bastante en entredicho, pero claro al PSOE no se le piden cuentas. Se han llevado años insultando al PP por el caso de los trajes de Camps y ellos mientras si dar explicaciones ni de ERES ni de nada. Vamos a lavar nuestra ropa, antes de intentar lavar la del vecino.

Sevilla está de enhorabuena

Más calles a menor coste. La iluminación navideña, se ha ampliado en 43 calles más respecto a la del pasado año, hasta alcanzar las 112. De ellas, 96 corren a cargo de la Gerencia de Urbanismo, mientras que 12 se han podido iluminar gracias a la colaboración de la Federación Provincial de Comerciantes (Aprocom). El coste total del alumbrado asciende a un total de 400.724 euros, de los que el Ayuntamiento sólo tiene que pagar 250.724. Del resto se ha hecho cargo la empresa Rendelsur, distribuidora de Coca Cola. El PP, ha empezado a demostrar que se puede gestionar el dinero de los sevillanos de forma eficiente sin derrochar ni malgastar. A pesar de que aún se deben 21.097 euros del año 2009 y 300.321 euros de la pasada Navidad, gracias a la nefasta administración del PSOE. Aunque muchos ya critican al Sr. Zoido, que lleva tres días en la alcaldía y han estado tragando al PSOE 30 años, sin decir ni pio, pero son los que prefieren que Sevilla se hunda antes de que gobierne el PP. Eso nos ha llevado donde estamos, el borreguismo, el seguir al PSOE pase lo que pase. A ver si aprendemos de una vez y echamos de todos los ayuntamiento a estos socialistos que estás llevando a nuestro país y a nuestras ciudades a la ruina. Sevilla está cambiando gracias al PP. Esto no tiene nada que ver con derechas o izquierdas (que no creo que exista), sino con el sentido común. Por cierto Sr. Rodrigo Torrijos, en Sevilla se celebra la NAVIDAD, no el solsticio de invierno.